Changos y Aymaras
Un pueblo frente al mar
| Los Changos se extendieron desde el norte de Perú hasta las costas de la Cuarta Región de Chile. En toda su zona de influencia mantuvieron un constante intercambio económico y cultural con los pueblos del interior |
| La ornamentación personal fue parte importante de las costumbres de los pueblos changos. Confeccionaban flautines con huesos de aves marinas y collares de conchillas |
| Morteros y vasijas en pieda o «lava negra» eran confeccionados por los Changos cerca del año cero. |
Curtidos por el sol
| La tumba de este «señor de la costa» fue hallada cerca de Iquique. Se estima que vivió en la zona de Bajo Molle en el año 1.200 DC. Usa un chaleco de lana y un sombrero confeccionado con plumas de aves tropicales. Cazaba con arco y flecha. Guardaba sus utensilios en un «Carcaj» de piel de zorro. |
En sus rituales funerarios, los Changos confeccionaban pequeñas balsas de madera de cactus como una manera de proveer al difunto de todo lo necesario para «seguir la vida». Todos los artefactos que iban junto al difunto eran pintados de rojo, colo considerado para las ceremonias de luto.
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Saladores de Pescado
Una vida contemporánea
En su época más primitiva los hombres de la costa utilizaban taparrabos confeccionados con fibras vegetales.
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| Los tejidos con lanas de auquénidos y, en algunos casos, de cabello humano, forman parte de los vestigios que dejaron los primitivos habitantes de la costa. |
| Tiwanaku también trajo el uso de alucinógenos en ceremonias religiosas. En los asentamiento de la costa se encontraron diversas formas de tablillas, tubos para aspirar y brochas para limpiar. |
| Varias reproducciones realizadas por historiadores consignan que los changos utilizaron sus embarcaciones para transportar salitre hacia los barcos. |
Los pueblos del interior
Influencia Tiwanaku
La identidad aymara
Antes de la presencia Inca en estas tierras, de la llegada de los españoles y la posterior creación de los estados, el pueblo aymara estaba presente en el altiplano; en los valles y oasis de la Primera Región.
Con mil años de historia como pueblo unificado en una sola lengua, costumbres y organización social, esta cultura evolucionó gracias a la creación de los reinos o señoríos indígenas.
estos grupos, esparcidos en lo que hoy es Bolivia, Perú y Chile, se reunían en reinos que tenían en común la lengua aymara o Haque Aru.
Con el paso de los siglos, unieron criterios culturales hasta convertirse en lo que actualmente se conoce como «Nación Aymara».
– A pesar de la imposición de la cultura hispana, el pueblo aymara continúa con muchas de sus tradiciones hasta la actualidad.
– Los «yatiri» o curanderos aymaras aún prestan sus servicios en los poblados del altiplano. El arte de sanar se pasa de generación en generación desde tiempos prehispánicos.
Dibujos en la tierra
Los aymaras mantuvieron un gran desarrollo cultural durante el periodo conocido como de Desarrollo Regional, entre el 1100 y 1470 DC.
Conformaron territorios autónomos y construyeron los pukaras que eran fortalezas defensivas en contra del ataque de pueblos foráneos o rivales.
En este periodo también se construyeron los geoglifos en los faldeos de algunos cerros de la Primera Región. Cada geoglifo tenía una ubicación estratégica, en los cerros, en los faldeos orientales dela Cordillera de la Costa, el sector de Pintados y en las quebradas que atraviesan la Pampa del Tamarugal.
Existen desde el valle de Azapa hasta el Río Loa.
Investigaciones actuales han determinado que el objetivo de los geoglifos era señalizar el paso de las caravanas entre la sierra y la costa y mostrar puntos para abastecerse de agua.
También por su simbología no se descarta que cumplieran funciones rituales o de culto a las divinidades.
– El Gigante de Atacama ubicado en el cerro Unita, es uno de los geoglifos más reconocidos en el Norte Grande de Chile.
– Los geoglifos de Pintados en la comuna de Pozo Almonte, indican el paso de grupos de caravanas hacia la costa.
Territorio Aymara
Para el antropólogo Olaf Olmos, el concepto de «Territorio Aymara» viene de tiempos inmemoriales. A su juicio «fue antes de los Incas, de la llegada de los españoles y previo a la conformación de los países».
Dentro de la cosmología prehispánica existía la idea de una sola y gran nación que ocupaba, vivían y compartía los recursos provenientes del mar, valles, sierra y selva.
«Esta era la nación aymara que la conformaban los reinos como los Collas, Pacajes, Carangas, Omasuyos, Canas, Canchis, Ubinas, Lipez, Collaguas, que junto a otros pequeños señoríos tenían en común la lengua Haque Aru; una cerámica que usaba colores similares y una misma forma de organizar la comunidad en mitades o sayas».
Todos los pueblos compartían creencias, una misma forma de entender y comprender el mundo, una misma religión, además de utilizar sin problemas los recursos de un mismo y gran territorio, ubicado desde las cercanías de la selva, el altiplano y hasta los pequeños y grandes valles serranos y costeños.
«A este territorio respetaban y rendían culto porque de sus recursos vegetales, animales, suelos agrícolas y aguas sabían que dependían sus posibilidades de vivir».
Esta conciencia social genera el respeto y culto a la «Pachamama».De ella dependía la subsistencia de la comunidad, la familia, los hijos y del ganado.
Sus antiguos habitantes relataban a través de mitos y leyendas cómo de las aguas había surgido la vida y dado origen a sus antepasados creadores de los linajes, de sus reinos o señoríos, en los cuales ellos reconocían sus parentesco.
En la religiosidad y creencias de estos pueblos, también los animales eran importantes. A través, de ritos se les rendía cultos a especies de gran prestigio para la forma de comprender el mundo. El puma, el cóndor, la serpiente, el zorro y la rana fueron algunos de estos animales sagrados. Muchos de los ritos que ellos representaban asimilaban los movimientos, sonidos o comportamiento de estas especies.
«El hombre andino se veía a sí mismo como parte de esa naturaleza en la cual vivía y esa es la visión que aún conserva», señala Olmos.
Construción en los cerros
Existen dos familias de geoglifos. Una de ellas aprovecha el material rocoso colo oscuro para dibujar una especie de mosaico que contrasta con el fondo más claro de la tierra. Otra técnica empleada es el «raspaje» de la capa superficial oxidada, resultando unos dibujos claros contra el fondo oscuro del suelo.
Los tipos de dibujos han sido clasificados en familias geométricas con círculos, cuadrados y rombos, además de líneas quebradas. También están las familias zoomórficas que representan a animales, especialmente grupos de camélidos, pumas, y aves. La familia antropomórfica utiliza figuras humanas, a veces usando arcos y flechas. En general los geoglifos reúnen figuras que pertenecen a más de uno de estos tres grupos.
– Los geoglifos se localizan en lugares visibles como cerros aislados y en los faldeos orientales de la Cordillera de la Costa.
Los aymaras y la influencia Inca
En el altiplano, donde las comunidades mantenían una fuerte conexión social y económica, surgieron los primeros avances del imperio de los Incas. Con la expansión del Tawantinsuyo o de los cuatro «suyos», como se conocían en lengua quechua al imperio Inca, e desarrollo de los reinos y señoríos aumaras es transformado en 1470 en un anexo o provincia dependiente del Cuzco. el avance de los Incas se extendió hasta el río Maule.
Para llevar a cabo el proceso de dominación, los incas trasladaron colonias militares y campesinas a los valles asimilados. Con ellos construyeron un complejo sistema de vías de comunicación que hoy es conocido en todo el mundo como el «Camino del Inca».
El antropólogo Olaf Olmos explica que los incas al conquistas a los aymaras, les exigieron el pago de tributo en productos agrícolas, artesanales y mano de obra. Todo esto para llevar a cabo los trabajos que emprendió el imperi
o en ese tiempo como caminos, puentes y obras de riego.
a pesar de esta presión, el inca les respetó su forma de organización social, fiestas, creencias y religiosas, costumbre y sus propios jefes; pero al mismo tiempo, dependían políticamente del dominio del Cuzco.
El dominio inca duró apenas 65 años, ya que en 1535 llegaron los españoles quienes cambiaron el destino del imperio y, con ello, el futuro de la Provincia de Iquique.
– Kenos era un cáliz sagrado de madera que se utilizaba en las ceremonias incas.
– El Camino del Inca, cuya construcción comenzó en 1438 DC, atravesaba todo el imperio. Partes de esta ruta aún existen en el altiplano chileno, entre Putre y San Pedro Atacama.
– El entierro inca en Cerro Esmeralda fue encontrado hace 20 años. En él se hallaron dos cuerpos: una doncella de 18 años y una niña de 9 que presumiblemente era su servidora. Fueron sacrificadas a mediados del siglo XV, antes de la llegada de los españoles.
Los Camélidos
Los camélidos andinos se encuentran emparentados con los camellos y son los mayores animales nativos de esta zona. Fueron y son utilizados por el pueblo aymara tanto para transporte como fuente de lana, cuero y alimento.
Los españoles llamaban «oveja» a la llama y describieron en sus crónicas el uso múltipleqe le deban los indígenas.
Llama.- Es el de mayor tamaño entre los camélidos andinos. Es domesticable y usado como animal de carga y para alimentación. Su lana es la más gruesa entre los camélidos. Da unos 4 kilos de lana con esquila cada dos años. Es el menos selectivo en su alimentación y pasta entre prados de paja brava, sin ningún problema.
Vicuña.- Es el más pequeño de los cuatro camélidos sudamericanos. No se puede domesticar. Vive en grupos familiares de un macho y hasta de 5 hembras. Se mueve entre los pastizales y bofedales del altiplano. La hembra sólo tiene una cría al año. Fue casi exterminado por la demanda de su cuero y lana. Gran valor tiene su lana, ya que es la más delgada fibra animal existente en el mundo después de la que genera el gusano de seda. Fue empleada en los textiles más finos en las culturas nativas. La vicuña sólo produce 180 gramos de lana en un lapso de dos años. Actualmente esta especie está protegida . En 1973 existían mil de estos animales. A mediados de los años 90, su número llegaba a los 27.000.
Guanaco.- De color café claro, pelo corto y de tamaño un poco mayor que la vicuña, es de difícil domesticación. Hoy existen cerca de 1.000 ejemplares en los parques nacionales de Chile (año 2000).
Alpaca.- Es un poco más pequeña que la llama. Tiene una gruesa capa de lana que cubre hasta los ojos. Su lana es de variados colores desde el blanco, pasando por una gran gama de caé y gris, hasta el negro puro. Rinde hast 5 kilos de lana cada dos años. La textura es delgada y sedosa, por lo que la convierte en la mejor para los tejidos de calidad. La alpaca es la más selectiva en su alimentación y sólo come en los bofedales, donde los pastos son más tiernos
Primeros habitantes
Periodo Arcaico: 8.000 a 1.000 AC. Destaca la cultura Chinchorro en el litoral de Arica e Iquique. Son pueblos cazadores y recolectores.

Periodo Formativo: 1.000 AC a 300 DC. Marca el inicio de la domesticación y pastoreo de animales acompañado de una agricultura incipiente. También comienza la alfarería rudimentaria y el manejo de metales. Los textiles son dibujados con motivos geométricos.
Periodo Tiwanaku: 300 a 1.100 DC. El imperio desarrollado en la cuenca del Lago Titicaca en el altiplano boliviano extiende su influencia hacia Chile. Se intensifica el comercio entre la costa, la sierra y el altiplano. Aportan nuevas técnicas como el uso de terrazas y canales. La cerámica muestra diseños con trazos negros sobre fondo rojo y blanco. También introducen el uso de alucinógenos en ceremonias rituales.
Periodo de Desarrollo Regional: 1.100 a 1.470 DC. Es la época de los señoríos autónomos. Las manifestaciones culturales expresadas en vestimentas objetos de ornato y utilitarios revelan un extraordinario desarrollo en el uso del color. Aparecen los pukaras, fortalezas que defiende los territorios autónomos.
Periodo Inca: 1.470 a 1.535 DC. El Imperio Inca nace en la sierra peruana y se extiende a Chile hasta el río Maule. Implica la creación de vías de comunicación. Traen nuevas técnicas y estilos para la cestería, cerámica y textiles. Este corto periodo se acaba con la irrupción de los primeros conquistadores españoles, quienes generan una profunda transformación en las comunidades nativas.