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Hace años que se escucha que Iquique tiene todo para progresar. Por ejemplo, existe una Zona Franca totalmente consolidada, una serie de atractivos turísticos, su ubicación es privilegiada en el Cono Sur de América, hay presencia de grandes inversiones y nuestro desierto y cordillera ofrece una gran gama de recursos para la explotación minera.
Sin embargo, y pese a todas estas ventajas, hay una sensación que algo falta y constantemente se hace rondar el temor de un futuro caótico. Es por ello, que ya es tiempo de cambiar de actitud y comenzar a sumar adeptos en la forma de enfrentar los desafíos de la ciudad.
Y una forma de lograr el crecimiento es el trabajo conjunto, donde se dejen de lado los protagonismos y se trabaje por el bien común. Un ejemplo de lo anterior son los ya populares paros y manifestaciones, donde ciertos gremios luchan por problemas del día a día y no se proyectan por el mañana, dejando como único testigo de su accionar humaredas generadas por la quema de neumáticos.
Ya es tiempo de dar el salto por el cual todos sueñan. Y en ese ámbito, es de vital importancia los avances en la forma de pensar y en la introducción de las nuevas tecnologías, como el Wi Fi que permite la conectividad a Internet en espacios abiertos, sin depender de una conexión física.
En países del primer mundo esto último es ya una realidad, a la cual se han sumado en Chile ciudades como Puerto Montt y Salamanca, donde la empresa privada y los respectivos municipios han hecho esfuerzos para lograr «iluminar» esas comunas. Las ventajas del Wi Fi son increíbles y abren no sólo puertas para mejorar la conectividad, sino que se transforman en una ventaja más al momento de ofertar nuestra zona como un destino turístico.
Debemos recordar que numerosas personas y políticos coinciden en la necesidad de transformar a Iquique en un polo tecnológico, sin embargo, el pasar de los discursos a los hechos ha sido más demorosos de lo que exige la competencia.
En Iquique un sector del Paseo Baquedano, el mall Las Américas y el servicentro Copec de Playa Brava cuentan con estos servicios gratuitos de conexión. Ya es tiempo de sumar otras áreas y unir a diferentes actores ligados a la materia, como las universidades, centros de capacitación, importadores de tecnología, casas comerciales, empresarios turísticos y autoridades comunales y regionales, quienes deben unir sus esfuerzos para masificar estos sistemas que permiten el ingreso a la era tecnológica y del conocimiento.
Es de esperar que todos los actores antes citados logren avances y coordinaciones, ya que las nuevas generaciones deben tener oportunidades que les permitan mejorar no sólo sus instrucciones formales, sino también sus competencias y forma de ver y acercarse al mundo del siglo XXI.
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